La abducción de la familia Avis
Abducciones hay muchas en el Fenómeno OVNI, unas espectaculares y otras terroríficas, cada cual más o menos importante para el que la estudia, investiga o para el que la descubre en un texto. En esta publicación quiero ofreceros la “Abducción de la familia Avis” ocurrida en Inglaterra, un contacto del 3º y 4º tipo a la vez, muy interesante por el hecho en sí y por los hechos posteriores, nada comunes en el resto de casos de abducciones.
Este caso tuvo lugar el 27 de octubre de 1974 en Aveley (Inglaterra), sus protagonistas fueron una familia inglesa compuesta por un matrimonio y sus tres hijos. John Avis y su esposa Elaine viajaban en coche junto a sus hijos para visitar a la madre de Elaine que vivía en Harold Hil. Sobre las diez de la noche, cuando les faltaban unos treinta minutos para llegar a casa de la abuela de los niños, vieron una fuerte luz en el horizonte sobre la carretera, a los pocos minutos esa luz con forma esférica se colocó al lado izquierdo del coche que conducía John. La bola de luz continuó al lado del coche durante unos treinta segundos y desapareció tan rápido como apareció.
Unos 400m después de que desapareciese la bola de luz se acercaron a una curva donde había una espesa niebla (muy abundantes en esa zona en esas fechas), con lo que John disminuyo la velocidad por precaución. Una vez dentro de la niebla comenzaron a ocurrir fallos en la radio del vehículo y en las luces, la conducción se hizo muy complicada, a los pocos kilómetros salieron de la niebla y llegaron a casa de la madre de Elaine.
Al llegar y detener el vehículo John descubrió que los kilómetros que marcaba él cuenta kilómetros eran muchos menos de los que deberían, pero eso no era lo único extraño, la hora del reloj de John marcaba la una y media de la madrugada. Pensando que se habría roto su reloj le preguntó a Elaine que hora tenia, su reloj también marcaba la una y media de la madrugada, los relojes de sus tres hijos también tenían la misma hora ¿Qué había ocurrido con esas tres horas?
El matrimonio, muy preocupado por lo que ocurrió por la noche, decidieron ir al médico para saber si podrían haber sufrido algún tipo de mareo u otro hecho, algo que explicase la amnesia de toda la familia. Como era de esperar, no obtuvieron ninguna ayuda ni solución, solo consiguieron más dudas, incomprensión y algunas que otras risas de los demás. El ufólogo Andrew Collins se enteró de su caso, por lo que le contaron pensó que podrían haber sido abducidos, conocedor de los buenos resultados que estaba dando la hipnosis en los casos de abducidos, les puso en contacto con el doctor Finch y el experto hipnólogo Leonard Wilder, asesores de la revista de Ufología Flying Saucer Review.
John y Elaine se sometieron a hipnosis individualmente, pero a la vez y en habitaciones distintas, para que no hubiese interferencias ni contaminación de testimonios. En total se realizaron tres sesiones de hipnosis durante un mes. Tanto John como Elaine relataron bajo hipnosis los mismos hechos, con las mismas descripciones y con los mismos detalles.
La sesión de hipnosis reveló que la familia al completo había sido abducida, su coche y ellos en su interior habían sido transportados al interior de una especie de nave. Toda la familia fue objeto de una serie de pruebas médicas, los testimonios de la primera sesión de hipnosis fueron escalofriantes, tanto John como Elaine veían a su pareja y a sus hijos siendo objeto de pruebas muy angustiosas y desagradables, veían y oían gritar a sus hijos sin poder hacer nada para defenderlos.
John y Elaine describieron a unos seres completamente distintos a los típicos grises que narran los testigos de otras abducciones. Los seres que les sometieron a las pruebas médicas no eran muy altos y tenían un aspecto como de “murciélago”, con grandes orejas puntiagudas y una nariz pequeña y casi plana, su cabeza era grande y casi cubierta de pelo. También había en la nave otros seres más altos que les enseñaron el interior de la nave después de las pruebas médicas. Estos seres más altos vestían unas especies de túnicas largas que les cubrían casi por completo y no dejaban ver su rostro.
Después de su abducción, la familia sufrió durante un año diferentes hechos extraños en su casa, más típicos de casas poseídas que de casas visitadas por extraterrestres, desaparecían objetos, tenían llamadas telefónicas con sonidos extraños durante el día y la noche, puertas y ventanas que se abrían y cerraban… Al año, estos hechos extraños desaparecieron para dar paso a las llamadas “visitas de dormitorio”, las cuales duraron cinco años en espacios de seis meses.
Hasta que un buen día todo terminó.
El caso de la familia Avis llegó a oídos de las Fuerzas Aéreas británicas, quienes investigaron su caso y realizaron más de diez entrevistas por separado a cada miembro de la familia, padres e hijos. John, viendo el tono que estaba consiguiendo su caso, no quiso conceder más entrevistas y pidió que se respetase el anonimato de su familia.
Con casos como el de esta familia, que sus relatos son obtenidos bajo hipnosis, no sobre un testimonio más o menos inventado, es increíble que se siga cerrando la ciencia y no quiera investigar y aunar esfuerzos para averiguar quién viene a “visitarnos” y con qué intenciones.
¿Cuántas pruebas más necesitan para tomarse en serio este fenómeno?
Con información de: @OVNIsyUFOs
Un partido revolucionario, si en verdad está empeñado en hacer y dirigir la revolución no puede renunciar al legítimo derecho de ser o formar parte de la vanguardia histórica que en efecto haga y dirija la revolución socialista en nuestro país, es de hipócritas decir que se lucha sin aspirar a tomar el poder y mucho más aún si se pretende desarrollar lucha diciendo que no busca ser vanguardia cuando en los hechos se actúa en esa dirección.
Ver másEl pasado 20 de noviembre, los cielos de la Sierra Tarahumara, en Chihuahua, se convirtieron en escenario de un insólito …
En los últimos meses, México ha vuelto a ser escenario de avistamientos de ovnis, o Fenómenos Aéreos No Identificados (FANI), …
Desde los rincones más oscuros del internet hasta discusiones en bares y tertulias académicas, las teorías conspirativas han alimentado las …