Microsoft firma contrato de 9.700 millones de dólares con IREN para potenciar su capacidad en IA

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Este lunes, Microsoft anunció un acuerdo por 9.700 millones de dólares con el operador de centros de datos IREN, en un movimiento estratégico para satisfacer la demanda creciente de procesamiento avanzado en inteligencia artificial. Reuters
Según el comunicado, Microsoft utilizará la infraestructura de IREN, que incluye centros de datos con una capacidad total de 2.910 megavatios alimentados con energía renovable, para desplegar las últimas generaciones de chips de Nvidia (incluyendo los modelos GB300) y otros equipos relacionados. Reuters
El acuerdo abonará aproximadamente 5.800 millones de dólares a la infraestructura de chip requerida, mientras el resto del monto contempla otros servicios e integración. Al apostar por la infraestructura externa de IREN, Microsoft evita tener que construir nuevos centros de datos o adquirir una gran cantidad de chips que podrían obsolescarse rápidamente. Reuters
Este contrato se produce en un momento en que la industria ya enfrenta un problema de capacidad: bancos de datos, grandes empresas de IA y plataformas cloud han informado que la falta de potencia de cálculo les impide capitalizar plenamente el auge del mercado de inteligencia artificial. Microsoft, en particular, busca acelerar su escalabilidad sin quedar rezagada ante competidores. Reuters
Algunos puntos relevantes de este desarrollo:

• La externalización de infraestructura de Microsoft subraya que incluso los gigantes tecnológicos prefieren modelos de “infraestructura como servicio” frente a construcciones propias ante el ritmo acelerado de innovación.
• IREN se beneficia enormemente: con una valoración previa de cerca de 16.500 millones de dólares, sus acciones subieron más de un 20 % en el mercado previo al inicio de la negociación tras conocerse el acuerdo. Reuters
• La utilización de chips avanzados de Nvidia significará un mayor uso de recursos computacionales para entrenamiento de modelos, despliegue de inferencia y operaciones de IA a gran escala: el acuerdo indica una apuesta decidida por IA generativa, visión artificial, análisis de datos y otras cargas crecientes.
• El hecho de que los centros de IREN estén alimentados completamente con energía renovable aporta un matiz relevante: la sostenibilidad se integra como componente operacional en infraestructuras clave para la IA. Esto puede marcar tendencia en la industria de centros de datos que tradicionalmente han estado muy energéticamente demandantes.
  Desde una perspectiva de mercado, este anuncio actúa como un golpe de acelerador para todo el ecosistema: proveedores de semiconductores, empresas de servicios cloud, desarrolladores de IA y clientes empresariales. Demuestra que la capacidad de cómputo ya no es un componente secundario sino central en la cadena de valor de la inteligencia artificial. En conclusión, el acuerdo de Microsoft con IREN representa tanto una respuesta a una necesidad operacional urgente como una señal de que la carrera por la dominación en IA pasa también por infraestructura, no solo por algoritmos.